Gracias Internet!!



A través de los años, el CROSSDRESSING en Argentina experimentó un sin fin de cambios, ajournándose no solo con la moda de turno, sino también con el vaivén político reinante.
Hasta los años ´80 o , ver transitar por la calle a una persona “ataviada con ropas contrarias a su sexo” era plausible de durísimos castigos originados no sólo en la Policía (que los reprimía sin hacerles ninguna pregunta), sino también por la ciudadanía en pleno que los maltrataba psicológicamente (Quizás, el peor de los maltratos). Todo esto, sin referirme siquiera a la oferta de sexo en la calle, simplemente “por vestirse de mujer”.
Ya más cercanos en el tiempo, a finales de los ´90, gracias a la llegada masiva de Internet a los hogares, las chicas cross dejaron de sentirse “bichos raros”. La gran red les mostraba que no estaban solas en el mundo. Con un solo click del mouse descubrían a miles de chic@s, que, simétricamente a ellas, se excitaban calzándose un buen par de panties; o bien sentían el vértigo que les otorgaba un hermoso par de zapatos de tacón…
El crossdressing empezó a diferenciarse del travestismo para ser una filosofía de vida; despegándose como dos vertientes bien diferentes.
Internet…Una gran vidriera, plataforma de despegue para muchas chicas que se animaron a salir del closet y disfrutan de una sexualidad plena, desarrollando esa dualidad que las transforma en objeto de deseo de miles de personas…